Sueño contigo - Serie Jugadores #2 - Lisa Kleypas (Reseña)

          Sueño contigo  ⎸Los jugadores #2

Lisa Kleypas  ⎸✶✶✶✶✶

En el refugio de su casa en la campiña inglesa, Sara Fielding escribe las historias con las que todos sueñan. Ahora, un nuevo libro y su innata curiosidad empujan a esta joven bien educada y de apariencia frágil a adentrarse en el peligroso territorio de Derek Craven.

De ladronzuelo en las callejuelas de Londres a propietario de la casa de juego más exclusiva de la capital... El fulgurante ascenso de Craven le ha convertido en uno de los hombres más ricos de Inglaterra, y también ha endurecido su corazón. Nadie sabe como él manipula las flaquezas humanas. Sin embargo, ya desgana, ahora se ve obligado a admitir en su mundo a esta joven de inocencia desarmante.

¡Advertencia! Contiene escenas sensibles para menores de edad. 

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¡Hola! Tras leer "Cuando tú llegaste", el primer tomo de la trilogía Jugadores de Lisa Kleypas, tenía muchísimas ganas de leer el siguiente libro: "Sueño contigo". No solo porque su antecesor me gustó bastante, sino porque ¡Parece que todo el fandom de Lisa adora a Derek Craven! Así que, aunque cuando lo conocí en el primer libro no sabía exactamente qué podía esperar de él, la intriga por conocer su historia me carcomía. Por ello, nada más terminar el otro, comencé a devorar el libro de Derek y Sara y ¡No me arrepiento para nada! El libro no me ha gustado, sino que lo he adorado absolutamente desde el primer capítulo.

Os pongo en contexto: Sara es una aclamada escritora que decide irse a vivir una temporada a la ciudad para poder sumergirse en las peores calles de Londres y así poder escribir su siguiente novela. Su investigación, sin embargo, dará un giro de ciento ochenta grados al toparse, con lo que parece, un intento de asesinato. Sara, sin pensarselo, acude a la ayuda de la pobre víctima, que es, nada más y nada menos, que Derek Craven, el propietario de la mejor casa de juegos de todo Londres. Por ello, pese a los intentos de Derek de alejar a aquella inocente y dulce muchacha de campo no solo de su club, sino también de su vida, Sara hará todo lo posible para obtener más "fuente de material", aunque tenga que adentrarse en un mundo demasiado peligroso.

Así pues, como podéis apreciar, el primer encuentro de ambos es la metáfora perfecta para describir la esencia de la novela. Por un lado Derek, sumergido en la absoluta oscuridad, que necesita desesperadamente un salvador. Y por otro lado, tenemos a Sara, totalmente fuera de lugar en ese mundo, pero con la suficiente valentía como para traer luz en el momento justo y necesario. En sí, la historia se basa en ese tira y afloja donde la conciencia de Derek, pese a sus propios deseos, se interponen constantemente con la esperanza de Sara de poder acercarse más a él. El protagonista considera que ella es un rayo de luz que él no merece, ya que hasta llegar a alcanzar dicho éxito ha tenido que realizar todo tipo de actividades, acciones que ni el diablo aprobaría.

Por ello, en relación a los personajes, he de decir que pese a que son lo más cliché del mundo, de alguna manera Lisa ha conseguido que ese hecho no me importe en absoluto (en realidad, reconozco que normalmente leer chico malo-chica buena no me importa bastante) pero es que aquí ni siquiera llegas a ser consciente de ello, ya que Lisa dota de fondo a los personajes. 

Desde el principio he entendido a ambos personajes y he podido empatizar con ellos. Derek ha tenido una infancia muy dura y no es un héroe, algo que, para mi agrado, no cambia a lo largo de la novela. Ha hecho cosas terribles por desesperación y se arrepiente terriblemente de ello, al igual que reconoce sus errores y sus prejuicios. Incluso cuando los protagonistas comienzan su relación oficialmente, él sigue siendo él. Sara, por otro lado, me ha desencantado un poco al final del libro. Veréis su personaje me ha gustado muchísimo al principio, más que Derek incluso, pero he sentido un cambio de actitud incoherente con ella al oficializar su relación. Ella era atrevida pero sensata, terriblemente preocupada por ponerle voz a las atrocidades que ocurren en los bajos fondos. Sin embargo, esto poco importa una vez que ambos se casan. Ella no tiene ningún problema en vivir en la casa de apuestas, ni a gastar el dinero de Derek pese a su malestar al principio de la novela sobre él ganando dinero a base de los problemas de adicción de otras personas. 

Por otro lado, he odiado a la villana de la historia, Joyce, la ex-amante de Derek. No me ha gustado nada su personaje, aunque como anti-heroína ha cumplido su función, pues la he odiado desde el principio hasta el final, sin que en ningún momento ella haya tenido un cambio de actitud. Es más, ojalá no toda la historia de la trama la impulsase tanto ella, ya que los personajes se conocen no solo por su culpa, sino que los dos sucesos más importantes en la historia son también consecuencia de las acciones de ella. Hubiera preferido que esos pasos los diera Derek solito y sin ningún tipo de empujón por parte de nadie. A excepción, eso sí ¡de Lily Raiford! He adorado todas las apariciones de la familia Raiford, escenas que aunque nos permiten ver el amor que se siguen profesando Alex y Lily, nunca se alejan del foco importante: su aportación a la historia de Derek. Es decir, Lisa no ha perdido de vista que esta es la historia de él, así que en todas las escenas de los Raiford, Derek siempre ha tenido un papel vital.

Y finalmente, en relación al resto de personajes secundarios, todos los trabajadores del club fueron geniales, aportan a la historia y cada uno tiene su papel. Sin embargo, sí que tengo reparos sobre dos de los personajes: de Ivo Jenner, he de decir que estoy decepcionada, pues esperaba que tuviera un papel más importante y llegaramos a conocer más de él (deseaba conocer también a la madre de Evie, pero esto no ocurre aquí). Además, no entendí del todo sus acciones. Y, por otro lado, me pareció totalmente absurdo el prometido de Sara. Es evidente que Lisa quería confrontar su personaje con el de Derek y generar al lector la sensación de que el primero no era correcto para Sara. Y lo consiguió pero ¿A qué precio? Para mi su relato roza lo absurdo, especialmente la escena donde él y el protagonista se conocen pues... Literalmente, él sale corriendo. No me ha parecido nada realista.

Por otro lado, en relación a la trama, que es narrada desde un doble punto de vista por ambos personajes, he de decir que todo me ha parecido muy hilado y coherente. La lectura fue amena desde la primera página, ya que la química entre ambos personajes fue palpable. El libro cuenta con escenas inmemorables, véase, por ejemplo, la del baile de máscaras o la del turbante. No obstante, sí que crítico algunas cosas que, aunque entiendo que se escribió en otra época y es narrada en un tiempo aún más lejano, me han resultado incómodas. Y sí, hablo de la escena de Derek y una de sus "empleadas" (esa chica no se merecía que él le cambiara el nombre solo por su parecido a su amada) y donde Derek es demasiado controlador (es cierto que Sara hace lo quiere pese a ello -muy bien por ella- y aunque la autora lo pinte como que él es así porque no tiene familia y no sabe comportarse, finaliza el libro y Derek sigue sin entender que ella no es de su propiedad. Ojalá Lisa hubiera insistido más en esta cuestión). Y, por último, no me ha gustado nada el final, no me apetecía leer algo tan denso en ese momento. Además, al ser el final todo ocurre muy rápido, así que le quita realismo a todo ese momento.

En síntesis, nos encontramos ante un muy buen libro de romance histórico, cuya reputación me parece más que merecida y que, pese a que no todo es perfecto, sí que lo roza.